viernes, 2 de junio de 2023

Encuentro Club de Clásicos de Munera


Hola a todos.
Parece que le he cogido al gusto a esto de publicar después de tanto tiempo...
Hace unos días, aprovechando que el día de la comunidad de Castilla la Mancha es festivo, el Club Clásicos de Munera, organizó un encuentro de vehículos clásicos, y después de haber reacondicionado la caja de cambios, me pareció una buena ocasión para probar el coche, además, la posibilidad de ver buenos coches y viejos amigos, también es un buen motivo para acudir.

Decidí ir solo hacia Munera, para no ir presionado por el grupo, y el coche va estupendamente, la caja de cambios va muy suave y sigue haciendo ruido, algo menos que antes, pero creo que costaría mantener una conversación con alguien conduciendo...

Ya llegado a Munera sin contratiempo, puedo saludar a algunos de los conocidos que nos solemos encontrar en este tipo de eventos, esperamos un poco y salimos hacia la bodega Fernández de la Ossa, en Minaya donde haremos una cata de los vino que han sacado al mercado. Es una bodega pequeña, familiar, que lleva apenas un par de años produciendo vinos.

Hacemos parada en Casas de la Peña, donde está la bodega, al lado de Minaya, es una pequeña aldea, con una plazuela donde aparcamos los coches. Nos hemos juntado 3 Land Rover, un serie3 109 con techo de lona, un serie3 88 y el mío, un serie IIA.

El 88 está repintado, y lleva instaladas unas ruedas más grandes que las originales, el 109 ha montado un motor 200TDi y también unas ruedas más grandes, el mío es completamente original, respetando motorización y neumáticos, la única modificación es la sencilla camperización, sin ninguna instalación que llevo en la parte trasera.

El perfil nada aerodinámico tan característico de los Land Rover evoca dureza, campo y aventura. 

Llaman la atención y se llevan todas las miradas, especialmente en pueblos, al haber sido un vehículo muy ligado al trabajo en el campo, todo el mundo en los pueblos o ha tenido uno o conoce a alguien que lo ha tenido, y todos tienen algún recuerdo con estos coches, por su incomodidad, dureza, fuerza o utilidad.

Uno de los vehículos más impresionantes que acudieron, por lo menos a mi modo de ver, fue este Pegaso Comet con cabina alargada, pertenecía a la compañía Hidroeléctrica Española y se dedicó a la instalación de bobinas de cable en sus tiempos, la cabina puede llevar hasta 9 pasajeros, y la pluma permitía la carga y descarga de las bobinas que in

stalaban. Tiene tracción total, aunque la velocidad máxima no supera los 70 kilómetros por hora, circulando con normalidad a 60 más bien. Es un icono del desarrollo industrial de España de los años 60 y 70.

Tras la cata de vinos, muy buenos, por cierto, salimos hacia Munera para comer, tras de mi iba un Land Rover, como podemos ver por el retrovisor.

Parece ser que también se dedicaron a hacer alguna fotografía.

El camino de vuelta era sencillo, pero siempre se agradece que la organización muestre indicaciones en los puntos clave del recorrida, más si aprovechan para hacer alguna fotografía como este par que os presento aquí.

Los giros con el Land Rover no pueden ser demasiado rápidos, no ayudan las suspensiones, que hace que el coche se incline bastante, ni los asientos, totalmente rectos, que no sujetan nada la espalda, tomar una curva a una velocidad alta con el Land Rover da una sensación de peligro real, pero bueno, siempre hay que adecuar la velocidad a la circulación...

Después de comer estuvimos un rato y ya nos despedimos de nuestros amigos hasta la próxima, hacia Albacete salíamos un mini, un fiat 500 y un Land Rover. Anunciaban fuertes lluvias para la tarde, y eso parecía a tenor de las nubes que desde la carretera, veíamos formarse sobre la ciudad.

No había viento, o si acaso ligeramente por la espalda, lo que permitió rodar a una velocidad de 75 kilómetros por hora cómodamente, sin forzar.

Unos 200 kilómetros para pasar un buen día disfrutando de nuestros coches viejos con conocidos y amigos.

Hasta la próxima.

























 

viernes, 26 de mayo de 2023

Caja de cambios

Hola de nuevo.
Os voy a contar lo último que le he hecho al Land Rover, ha sido algo no previsto, algo trabajoso, que me ha llevado bastante tiempo, pero finalmente, le ha venido muy bien. Hace ya algún tiempo, salí con le coche por ahí, y empecé a notar que le faltaba fuerza, el coche no cogía velocidad, bien es cierto que estos vehículos no son rápidos, pero en esa ocasión me pareció que era demasiado. Cuando uno anda con vehículos clásicos, o por lo menos a mi me pasa, uno siempre va pensando qué puede ir mal o qué puede fallar, y yo, entonces llegué a la conclusión  más o menos plausible de que al coche le fallaba el embrague, así que decidí quitar la caja de cambios y revisarlo. 


Lo primero es quitar los asientos, el suelo de la cabina y el cajón de los asientos para dejar la caja al descubierto. Es mucho trabajo porque son un montón de tornillos, pero no tiene mayor dificultad.


El cajón ya retirado, aprovecharé para limpiarlo bien antes de montarlo, pero eso será luego (aún queda bastante, más de lo que yo entonces pensaba, puesto que estimaba que en un par de semanas habría terminado).


Las chapas del túnel, palancas, alfombrillas y suelo, todo ordenado y recogido para cuando haya que volver a montar.

Antes de sacar la caja de cambios hay que hacer alguna tarea, desmontar el árbol de la transmisión trasera, desmontar el árbol de la transmisión delantera, y desconectar el latiguillo del embrage, también hay que quitar los silentblocks que sujetan la caja al chasis y ya lo tenemos todo listo para sacar la caja de cambios y poder acceder al embrague. A continuación levantamos la caja de cambios con una grúa ligeramente, y colocamos un taco de madera entre el motor y el chasis para que no bascule cuando quitemos la caja de cambios, ahora podemos quitar las tuercas que unen caja de cambios y motor, y podemos sacar la caja. Tendremos acceso al palto de presión del embrague, no se puede ver en la foto porque ya está retirado, y el disco de embrague. En principio, no veo yo nada raro en el embrague, y así me lo confirma un par de mecánicos a los que consulto, ¿a qué se debía la baja velocidad? Pues al embrague no se puede achacar nada, así que podría volver a montar y mirar por otro sitio, pero ya que tengo la caja fuera, decido revisarla, y eso será lo que alargue la operación...


Otra vista del motor y la cabina del coche, donde se ven las tuercas que sujetan la caja al motor, ahora que veo la foto, se me olvidó comentar que también hay que desconectar el reenvío del velocímetro, conectado a la salida de la caja de cambios, también habrá que mirar ese eje, puesto que el freno de mano no funciona, y ya me llamaron la atención en la ITV...

Lo primero es revisar el eje de salida, es posible que el retén se haya estropeado, y la salida de aceite haya engrasado el tambor de freno, restando su eficacia, una vez quitado el sistema de freno sigo sacando piezas, en la fotografía las láminas de precarga de los rodamientos de la caja del velocímetro, el piñón del velocímetro y numerosos tornillos y tuercas...

Para aliviar un poco el peso y hacer más manejable la caja y facilitar las operaciones, también retiré el conjunto de la overdrive o supermarcha, en el hueco de la izquierda, a la derecha el eje de salida ya sin la caja del velocímetro.

Me he llevado la herramienta que necesito, pero el sitio en el que está el coche está lejos de casa, y hace mucho frío, así que decido llevarme la caja al taller para seguir trabajando con ella con más comodidad.

La tapa de las barras selectoras de velocidad, retiradas, aunque no era la intención inicial , parece que me decido a revisar la caja de cambios por completo, ya que funciona con algo de brusquedad y hacer ruidos en primera, indicando que algo no anda bien por ahí dentro...

La palanca de cambios es muy sencilla comparada con lo que tiene dentro la caja de cambios, aún así, haremos una limpieza y engrasaremos para mejorar su funcionamiento.

El cilindro esclavo del embrague, que tanta guerra me dio al principio, también se desmontará y limpiará, algunas piezas de la transmisión de la fuerza están muy desgastadas, la palanca y el cojinete esférico, y también serán sustituidas.

Caja de cambios, transfer, campana de embrague, overdrive, freno de mano, cilindro de embrague, plato de presión, embrague, palancas... hasta 451 piezas o partes desmontadas que serán luego montadas y, presumiblemente, volverán a funcionar. 

Caja de cambios aún unida a la unidad transfer y selección de tracción delantera, listas para se demontadas.

Aquí podemos ver los ejes interiores de la caja de cambios, de izquierda a derecha, eje secundario, eje de salida y eje de entrada, aún serán desarmados para ser revisados.

Aquí vemos el soporte del cilindro esclavo del embrague con dos de las piezas principales que se cambiarían, el eje, al lado del muelle y el casquillo de bronce.

La caja de cambios ya separada de la unidad transfer.

A los ejes de la caja de cambios se suman ahora el piñón intermedio de la unidad transfer, para cambiar entre marchas normales y cortas, y la tapa inferior de la unidad transfer.

Y he aquí la razón por la que la operación se ha dilatado tanto en el tiempo, el pedido. Cuando uno busca piezas de repuesto en distintas páginas busca dos cosas, precio y disponibilidad, al final decidí hacer el pedido en una página de UK... Al poco tiempo, mensaje, y pienso " ya llega", pues no, era de la aduana, y es que con la salida de UK de la comunidad europea, hay que pagar impuestos y aranceles, lo que hace que el precio suba, pero bueno, ya está hecho, así que en cuanto llegaron las piezas me puse a montar.

No son grandes cosas, ni demasiado caras, pero al ser numerosas, la cosa va subiendo, aparte de las piezas que sí están rotas, conviene pedir juntas y rodamientos.

Dentro de la caja venía el piñón de la marcha primera en el eje secundario, puesto que el original estaba roto, seguramente el origen del traquetero y ruido que se oía al engranar esta marcha.

Instalando el bulón sobre el que gira el piñón intermedio de la caja transfer, muchas de las juntas y anillos tóricos estaban estropeados o faltaban, haciendo que la caja perdiera aceite por numerosos puntos.

La caja de cambios cos los ejes ya montados y la campana del embrague preparada para ser reensamblada a la unidad transfer, después de haber sido revisada.

Fijación del eje secundario de la caja de cambios al rodamiento de la campana del embrague. Es necesario realizar muchas operaciones, y hay que hacerlas en el orden adecuado si se quiere hacer bien, todo está explicado en los manuales de taller, pero aún así, hay a veces despistes, por lo que hay que estar muy muy atento.

Una vez la campana está fija a la caja de cambios, y el eje secundario fijo al rodamiento, se puede proceder a montar el mecanismo empujador del embrague, esta operación la hice antes de lo debido y me tocó desmontarlo para poder hacer las operaciones anteriores, aquí están en el orden adecuado.

Si queréis ver el montaje completo, podéis hacer click en el siguiente enlace: montaje de caja de cambios, lo tengo en stories en instagram. Después de todo este trabajo, la caja de cambios tiene esta estupenda pinta.

Parece nueva, es una pena, que luego no se vea y que luego se manche de barro y polvo, pero está diseñada para eso.

Una vez que llevamos la caja de cambios al coche ya podemos proceder a instalarla, teniendo cada parte en sitios distintos es imposible hacerlo... En un taller cercano pedimos prestada una grúa de taller y procedemos a la operación.

No he comentado que previamente se montó el embrague y el plato empujador utilizando el eje de entrada como centrador, de otra manera puede que el disco de embrague no quede centrado y a la hora de montar la caja de cambios no se pueda por no estar alineados el orificio del disco y el alojamiento en el disco de inercia. La operación de montaje requiere cuidado y un poquito de paciencia, poner en posición, bajar, encarar, y llevar a su sitio, pude hacerlo a la primera, sujetamos la caja con las tuercas y apretamos progresivamente, levantamos otra vez, ahora sujeta al motor para levantarlo ligeramente, quitamos el taco del motor y volvemos a bajar para que quede en su posición.

Una vez en su sitio hay que poner las tuercas de los silentblocks de los soportes, reenvío de cuentakilómetros, transmisión delantera, trasera y palancas.

Una vez montada la caja, ya pudimos probar el coche y comprobamos que iba más suave y hacía menos ruido, así que montamos todo lo que hemos ido quitando y finalmente ponemos una manta "nueva". Listo, ya tenemos coche de nuevo.

Nos vemos en otra, hasta entonces.













 

jueves, 25 de mayo de 2023

A NAVEGAR

Saludos de nuevo.
Con la baca nueva, puedo llevar casi cualquier cosa, es uno de los añadidos que más aspecto aventurero le dan a un coche todoterreno, puesto que siempre hemos asociado las expediciones y exploraciones a coches todoterreno cargados de un montón de cosas, latas de combustible, tiendas de campaña...


Me hice en este tiempo con un kayak, siempre me han llamado la atención, pero ver land rovers con kayaks o piraguas en la baca, volvieron a remover mi memoria, y cuando se me presentó uno, no pude evitar dejarlo pasar. El propio kayak merecería por sí solo una entrada, es de año 89, fabricado en la extinta RDA, basado en un diseño de los años 30 del siglo XX, desmontable construido en madera y lona, una belleza, vamos. 

El hecho de ser desmontable permite llevarlo en el maletero de un coche, pero con la baca, me ahorro los 20 minutos del montaje y los 20 del desmontaje, además queda espectacular.

Si llama la atención el coche solo, con el kayak encima atrae todas las miradas y provoca multitud de comentarios y caras de asombro y sorpresa.

Poder navegar después de conducir el Land Rover es muy relajante, mucho más silencioso y refrescante.

Otra forma de ver la naturaleza, más cercana y relajada.

En sintonía total con el entorno que lo rodea.

Como podéis imaginar, serán más las ocasiones en las que disfrute del kayak, pero mis andanzas con el Land Rover serán más numerosas, así que tendré material para ir subiendo por aquí.

Hasta la próxima.