lunes, 29 de febrero de 2016

Frenos al descubierto.

Hola a todos, aficionados a los Land Rover, a los cacharros, a desarmar para ver cómo funciona, restauradores y demás. Este domingo al fin terminé con la tarea que empecé hace un tiempo, quitar los tambores y revisar los frenos.
Pues bien, el tambor delantero derecho lo saqué tras quitar un tornillo rebelde con un destorgolpe, y el izquierdo después de multitud de martillazos, sólo se movió cuando le di un golpe bien dado, y es que la cosa no es cuestión de fuerza... Al golpear, le daba inclinado para no golpear el plato porta zapatas, los otros tambores han salido así, pero con éste no había manera, de modo que al final se me ocurrió la feliz idea de usar una llave de codo para apoyar en el tambor y dar el golpe en la dirección adecuada... Dos golpes bastaron.
Con los tambores fuera pude ya comprobar que los bombines delanteros estaban secos, lo que indica que no hay fugas, no así los traseros, totalmente engrasadas las zapatas (enormes zapatas) y los bombines, por los que además rezumaba el líquido de frenos y se salía a chorro al accionar el pedal.
De modo que procedo a desmontar las zapatas y los bombines traseros para llevarlos a un taller y que digan si los arreglo o sustituyo. Vamos con las instantáneas.

Tambor delantero izquierdo tras incontables  martillazos mal dados y dos bien.
Delantero derecho.
Trasero izquierdo ya sin el bombín.
Trasero derecho igual que el anterior.
Bombines a revisar.
Las zapatas las veo bien, pero no soy un experto, a ver que me dicen y os cuento. 
Saludos.


Este párrafo está editado tras la despedida anterior.
Esta tarde mismo he ido al taller a ver qué me contaban y esto me han dicho: los bombines serán reparados, se desmontarán, pulirán los asientos de los retenes de goma y vueltos a montar con retenes nuevos y a las zapatas se les pondrán forros nuevos aunque no están gastadas debido a que han estado mucho tiempo en contacto con el líquido de frenos y no tienen la efectividad que debieran. Mañana mismo estará todo terminado, y cuando lo recoja y tenga tiempo lo montaré y os lo contaré.
Nos vemos.

sábado, 13 de febrero de 2016

¡Fuera zapatos!

Hola de nuevo.
Un poquito más esta mañana. Os cuento: como sabéis, Romero...

Valga este parón en la entrada para comentar la decisión del nombre de mi Land Rover: se llamará Romero. Ha sido una decisión obligada (relativamente, si no hubiera querido, seguiría sin nombre), al poner los enlaces a los otros blogs que tengo sobre restauraciones, en este caso de tres Vespas con nombrado, por lo que me parecía raro que el Land Rover no tuviera.

Como iba comentando, si habéis visto las entradas anteriores, Romero funciona perfectamente, salvo por una cosa, y es que no frena absolutamente nada, bueno, a decir verdad está frenado porque rozan las zapatas en los tambores, pero el pedal no actúa. Así que tenía previsto, previa elevación del coche, quitar las ruedas y echar un vistazo ( tengo en mente cambiar los bombines de freno, y ya veremos si no me toca cambiar más cosas). Esta mañana he ido al local donde está Romero y he quitado las cuatro ruedas, previamente aflojadas. Barro seco por todos sitios, telarañas, nidos de huevos de araña y porquería a mogollón, grasa, polvo caracoles, bichos muertos... Rueda delantera derecha, imposible quitar los tornillos del tambor, les echaré desincrustante y a esperar, si no sale habrá que usar un destornillador con golpe. Rueda trasera derecha, muy bien, aunque como las zapatas rozan en el tambor he tenido que usar el martillo de fibra mucha suciedad, las zapatas engrasadas seguramente haya pérdida de líquido de frenos y una especie de carbonilla que será el ferodo de las zapatas, digo yo. Rueda delantera izquierda, como la derecha, a la espera. Rueda trasera izquierda, ha costado pero ha salido al final, misma pinta que la otra rueda. He podido comprobar que los bujes giran libre y suavemente y que ajustan perfectamente, es decir, forzándolos hacia arriba, abajo y los lados, no hay holgura apreciable, lo que significa que los rodamientos están bien, bueno, no están mal sería más propio decir. Hasta aquí he llegado, aunque he de decir que me he visto con el martillo de fibra y he dado algunos golpes de prueba. Primero a uno de los tirantes de abajo de la carrocería, el resultado me ha gustado, la chapa lateral ha ido saliendo a su sitio... Y en la parte posterior también he golpeado, con el resultado de eliminar un doblez que tenía la carrocería.
Aquí van las fotos:

Tambor delantero derecho, no he podido quitarlo.
Tambor trasero derecho fuera.
Tambor trasero izquierdo fuera también.
Tambor delantero izquierdo, sólo he podido sacar un tornillo de los tres que lo sujetan.
Por debajo se ve mucha suciedad y algo de óxido, pero superficial, no parece serio.
Y aquí lo golpeado con el martillo. La marca oscura vertical estaba hacia afuera.
Ha ido a su sitio, me queda muuuuucho trabajo.
Zona de obras.
Aunque no he podido con dos de los tambores esto me ha animado bastante.
Hasta pronto.